

DÍA 2
Corazón formado en el seno de la Virgen Madre por el Espíritu Santo
Reflexión “El Espíritu plasmó el Corazón de Cristo en el seno de María, que colaboró activamente con El como madre y como educadora.
Como Madre, Ella se adhirió consciente y libremente al proyecto salvífico de Dios Padre, siguiendo en un silencio lleno de adoración, el misterio de la vida que en Ella había brotado y se desarrollaba.
Como educadora, Ella plasmó el Corazón de su propio Hijo, introduciéndolo, junto con San José, en las tradiciones del pueblo elegido, inspirándole el amor a la ley del Señor, comunicándole la espiritualidad de los "pobres del Señor."
Ella lo ayudó a desarrollar su inteligencia y seguramente ejerció influjo en la formación de su temperamento. Aun sabiendo que su Niño la trascendía por ser "Hijo del Altísimo" (cf. Lc 1,32), no por ello la Virgen fue menos solicita de su educación humana (cf. Lc. 2,51)”.
Propósito: Rezar un Rosario pidiendo a la Virgen moldear nuestros corazones según el modelo de su Hijo.
Jaculatoria: HERMOSURA del Corazón de Jesús, cautivad mi corazón