2 de Junio
Mi Señor, tu amor sanador un día se posó sobre mi corazón y vació en él tus dulces consuelos, llenándolo de esperanza y deseo por alcanzar la felicidad.
Me has demostrado a lo largo y ancho de toda tu historia de amor, que tu Palabra rebosa en autoridad celestial y que Ella es principio y fin de todo.
Tu mayor autoridad es tu generosidad, tu amor desmedido, tu perdón reconciliador que a todos nos ofreces para apaciguar nuestras tormentas.
Ven y adéntrate en lo profundo de mi ser y haz que yo siempre tenga un corazón limpio y puro para recibir esa sabiduría que viene de Ti.
Toca mi corazón con el aliento sagrado de tu Espíritu y dale fuerzas para que yo siempre esté dispuesto a amar con libertad, sin prejuicios y sin ataduras.
Confío en tu bendición y en tu amor que en este momento derramas sobre mí y que me libera de todo aquello que no me permite avanzar ni crecer.
Guía mis acciones y mis pensamientos para que tome las mejores decisiones de vida. Que mi primera opción siempre seas Tú sin acobardarme ante nada.
Gracias por hacerme feliz y por las oportunidades que hoy me darás para crecer y poder ejercer el servicio para el cual fui creado. Amén...
Comments